La Interpretación fue, al comienzo de la historia de la astrología, algo reservado únicamente a los reyes y grandes personajes de la política: no había registros precisos de las horas de nacimiento de los miembros del populus, pero se asumía que el destino del gobernante sería el que signaría el de su pueblo.
Hoy se ha popularizado enormemente y hasta es una posibilidad regalar para el cumpleaños de un amigo una interpretación de la carta natal por parte de un astrólogo experimentado. Personalmente, desaliento esto, y no hago lecturas a personas que llegan por casualidad. Creo que una persona debe buscar la interpretación de su mapa natal por alguna cuestión específica, buscando respuestas frente a algo que no logra resolver con sus herramientas cotidianas.
Para interpretar una carta natal, necesitamos la fecha, hora y lugar de nacimiento de una persona, puesto que el mapa natal nos da la “foto” de cómo estaban los planetas en los signos y en las casas en el instante de nacimiento de un individuo. Con los jóvenes es fácil, puesto que suelen registrarse con hora y minuto exacto el nacimiento en instituciones sanitarias. Para los más grandes, un astrólogo responsable debe hacer un trabajo llamado rectificación, que comprende una serie de técnicas para ajustar el minuto de nacimiento de una persona. Esto no es menor, puesto que un minuto de diferencia puede significar un año a la hora de hacer una predicción, puede cambiar un ascendente o incluso la posición de la luna en la carta natal, y por eso es fundamental contar con horas rectificadas.
La interpretación de la carta natal puede ser sumamente útil como herramienta de autoconocimiento para el individuo. Si bien a mí me gusta mucho más la predicción, es indispensable hacer una buena intepretación incluso para mirar el futuro de alguien. La carta natal nos muestra aquello que nos sale más fácil, nuestras potencialidades, virtudes y elementos a favor, así como también las dificultades y obstáculos que cotidianamente nos afectan. Muchos psicólogos con conocimientos astrológicos usan la carta natal para complementar su terapia.
La intepretación de la carta natal puede orientarse a lo vocacional (¡muy útil para los adolescentes!), hacia lo amoroso (puede darnos pistas para dejar de tropezar siempre con el mismo escollo, o para tomar conciencia de aquello que nos hace más atractivos para los demás), hacia lo financiero, hacia las cuestiones de la salud y, virtualmente, puede abarcar todos (sí, TODOS) los temas y preguntas que se nos puedan ocurrir.
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