Actualmente, el mundo se rige por el calendario Gregoriano, que es el que instauró la Iglesia Católica en 1583. Este calendario se mueve en la frecuencia 12:60 (12 meses al año y 60 minutos a la hora). Es mecanizado y adormece la mente y la conciencia, porque va en contra de los ritmos de la naturaleza y, por tanto, del ser humano. En el calendario Gregoriano, las unidades con las que mide el tiempo no son regulares. Unos meses tienen 30 días y otros 31, ó 28, ó 29 si se trata de un año bisiesto. Por el contrario, en el calendario de las Trece Lunas todos sus meses son de 28 días. Y así, nos permite saber siempre en qué día de la semana caerá, por ejemplo, el día 1, que será en lunes. Los cálculos resultan más fáciles porque significa que cualquier día caerá en el mismo día de la semana, año tras año El calendario de las trece lunas es el que nos devuelve el orden natural del tiempo: 13 lunas de 28 días, más el día fuera del tiempo. La frecuencia del tiempo natural es 13:20 (13 meses y 20 minutos). Ello nos permite contar el tiempo en ciclos lunares, que contienen cada uno 4 semanas de siete días. Esto da como resultado 364 días, más el día fuera del tiempo, que es el 25 de julio, un día destinado a la meditación, el agradecimiento y la celebración. Cada año, el calendario de las 13 Lunas permanece inalterable. La primera luna marca el día de año nuevo, que será siempre el 26 de julio. Ese día coincide con la salida de la estrella Sirio, que guarda una relación directa con nuestro sol. El calendario de las 13 Lunas nos armoniza con la galaxia. Vistas: 187 Me gusta A 14 miembros les gusta esto CompartirTwitter Facebook